comenzaba con un túnel pequeño por el que el cuerpo cabía muy justo, hacia abajo. de hecho no se cabía con la mochila puesta, había que irla empujando con los pies hacia abajo! la sensación era muy extraña, ya que además de estar en un hueco muy estrecho, se sumaba la incomodidad de la corriente de aire que corría por ese conducto por la diferencia de presión entre la cueva y el exterior.
una vez llegado a abajo del todo, el frío era el mismo, pero sin viento. de hecho, las fotos salían todas como con una capa gris, como una neblina... sabes por qué? eso era el vapor que desprendía nuestro cuerpo en contraste con el frío de la cueva! si mirabas a algún compañero con la linterna del frontal se podía ver cómo le salía vapor de todo el cuerpo, dando sensación de que se quemaba!
preparando el rápel.
yo en el rápel.tras el rápel, se llegaba a una gran sala llena de formaciones impresionantes. tras esta sala, seguíamos por una zona con el agua al cuello, bastante fría por cierto, y por pasillos sinuosos y muy bonitos.
mi amigo y yo contemplando las formaciones.
al final salimos de la cueva a las 2:00 de la mañana, habiendo estado dentro 6h. acabamos bastante cansados y con mucho frío, pero a gusto y con ganas de hacer otra. volvimos a Zaragoza a eso de las 5:00 de la mañana.... y.... me tocó despedirme de gente muy maja!!
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